Estos días comienzan las clases en las universidades españolas. Estudiantes y profesores comienzan este curso en un ambiente caracterizado por una mezcla de pesimismo e indignación. Los primeros porque ven que este año suben las tasas y, a la vez, tienen un panorama de inserción laboral poco alentador. Los segundos porque la mayoría de ellos tendrán que impartir más horas de clase al año y sin la paga extra de diciembre que se suma a la bajada de sueldo del pasado año. En este contexto, en algunas universidades el acto oficial de apertura del curso académico ha estado acompañado de sonoras protestas de profesores y estudiantes contra los recortes en la educación pública.
Más allá de la idoneidad de estas reformas, lo cierto es que si incluso con la subida de tasas los estudiantes han decidido matricularse en la universidad es porque esperan que su inversión se rentabilizará posteriormente (más…)